Gobierno lamentó muerte de 5 militares y pidió acabar cuanto antes el conflicto

Al término de las cinco visitas de delegaciones de víctimas a La Habana, el jefe del equipo negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, calificó como un paso sin precedentes el reconocimiento de responsabilidad de las Farc en la masacre de Bojayá en el departamento de Chocó, en el que murieron 79 personas al interior de una iglesia en el 2002.   

“Quiero expresar un sincero reconocimiento al acto inédito en el que las Farc ofrecieron disculpas públicas a las víctimas de la tragedia de Bojayá y anunciaron medidas reales que contribuyan a la verdad y la reparación de las víctimas de ese doloroso hecho (…) este encuentro con las víctimas, sin antecedentes y de cara al país, es un paso valioso y muy diciente en esta etapa del proceso”, manifestó.

Agregó que estos gestos contribuyen al desescalamientos del conflicto y también son un efecto práctico de la aplicación de los diez principios que se acordaron para desarrollar el punto relativo a las víctimas, haciendo énfasis en el reconocimiento y la reparación.

“El reconocimiento de la responsabilidad es la esencia del desafío para terminar el conflicto, todos los responsables deben reconocer el daño causado, el gobierno ha hecho lo propio”, agregó De la Calle al tiempo que confió que este sea uno de muchos más gestos y hechos de paz que reflejen un camino real de un acuerdo definitivo.

Sin embargo, el jefe del equipo negociador del Gobierno rechazó la muerte de cinco soldados en el departamento del Cauca provocado por las Farc, por lo que pidió acelerar las negociaciones para finalizar cuanto antes nuevas confrontaciones.

“Tenemos que lamentar profundamente la muerte de varios uniformados por acciones de la guerrilla. Al enviar nuestro mensaje de condolencia a sus familiares y a los miembros de las Fuerzas Armadas, tenemos que reiterar que el propósito de las conversaciones es que esto no se repita”, enfatizó Humberto de la Calle.