La sociedad colombiana inició debate sobre participación de las Farc en política
El foro ciudadano se prolongará hasta el martes, cuando se harán públicas las conclusiones de los tres días de debate en el que participan 18 sectores sociales.
La sociedad colombiana inició el debate sobre la participación en política de los guerrilleros desmovilizados tras un eventual acuerdo de paz con el Gobierno, en el marco del foro sobre participación política organizado por la ONU y la Universidad Nacional.
Unas 1.200 personas se dieron cita en el foro, a petición de las delegaciones negociadoras del Gobierno y la guerrilla, que adelantan reuniones en La Habana.
Entre los participantes en este segundo foro (el primero se realizó en diciembre del pasado año y trató sobre el problema agrario) estuvieron representantes de los doce partidos con personería jurídica y de otros movimientos sociales y políticos.
El representante del movimiento Progresistas, Antonio Navarro Wolff, explicó en una entrevista con Efe que la condición "indispensable" para que se alcance un acuerdo de paz es que exista la participación política. "Hay un sector de la opinión colombiana que dice que eso no se puede", cuestionó.
Según una reciente encuesta, el 67 % de los colombianos se opone a que los miembros desmovilizados de las Farc participen en política.
Navarro Wolff, quien fue miembro de la desaparecida guerrilla del M-19, dijo además que "a nadie le cabe en la cabeza que los jefes de las FARC acepten irse presos" y que "la participación de ellos en la política es una condición obvia" de la negociación.
Mientras se celebra este foro se presume que las Farc y el Gobierno están a punto de abordar el segundo punto de la agenda de negociación, las garantías para ejercer la oposición política, tras concluir el primero, que trata el problema de la tierra.
En el encuentro, una mayoría de voces se mostraron partidarias de la participación política de sectores guerrilleros, incluido Navarro Wolff, con la única oposición del movimiento Centro Democrático, ausente en el foro y liderado por el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).
El senador del Partido Conservador Hernán Andrade, por su parte, explicó a Efe que su formación llega a este momento histórico con una posición "conciliadora, serena y reflexiva" y con la voluntad de "contribuir al logro de la paz".
Andrade se mostró favorable a ampliar las garantías políticas para "abrir el espacio democrático" y facilitar así "el aterrizaje de los grupos insurgentes" en el sistema político.
Aunque también hizo una petición a las Farc: "Los que se van a desmovilizar tienen que entender que se separan del aparato armado".
También estuvo presente en el foro la exsenadora Piedad Córdoba, líder del movimiento político izquierdista Marcha Patriótica, del que se ha dicho que puede ser el espacio utilizado por los guerrilleros desmovilizados para participar en política.
La exsenadora Córdoba, destituida e inhabilitada por la Procuraduría en 2010 por supuestos vínculos con las FARC, reclamó la implantación de "un sistema electoral confiable, transparente y con voto electrónico".
También planteó una "apertura del sistema democrático" que, en su opinión, "está establecido únicamente para beneficiar al establecimiento que se expresa a través de los partidos tradicionales".
Unas 1.200 personas se dieron cita en el foro, a petición de las delegaciones negociadoras del Gobierno y la guerrilla, que adelantan reuniones en La Habana.
Entre los participantes en este segundo foro (el primero se realizó en diciembre del pasado año y trató sobre el problema agrario) estuvieron representantes de los doce partidos con personería jurídica y de otros movimientos sociales y políticos.
El representante del movimiento Progresistas, Antonio Navarro Wolff, explicó en una entrevista con Efe que la condición "indispensable" para que se alcance un acuerdo de paz es que exista la participación política. "Hay un sector de la opinión colombiana que dice que eso no se puede", cuestionó.
Según una reciente encuesta, el 67 % de los colombianos se opone a que los miembros desmovilizados de las Farc participen en política.
Navarro Wolff, quien fue miembro de la desaparecida guerrilla del M-19, dijo además que "a nadie le cabe en la cabeza que los jefes de las FARC acepten irse presos" y que "la participación de ellos en la política es una condición obvia" de la negociación.
Mientras se celebra este foro se presume que las Farc y el Gobierno están a punto de abordar el segundo punto de la agenda de negociación, las garantías para ejercer la oposición política, tras concluir el primero, que trata el problema de la tierra.
En el encuentro, una mayoría de voces se mostraron partidarias de la participación política de sectores guerrilleros, incluido Navarro Wolff, con la única oposición del movimiento Centro Democrático, ausente en el foro y liderado por el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).
El senador del Partido Conservador Hernán Andrade, por su parte, explicó a Efe que su formación llega a este momento histórico con una posición "conciliadora, serena y reflexiva" y con la voluntad de "contribuir al logro de la paz".
Andrade se mostró favorable a ampliar las garantías políticas para "abrir el espacio democrático" y facilitar así "el aterrizaje de los grupos insurgentes" en el sistema político.
Aunque también hizo una petición a las Farc: "Los que se van a desmovilizar tienen que entender que se separan del aparato armado".
También estuvo presente en el foro la exsenadora Piedad Córdoba, líder del movimiento político izquierdista Marcha Patriótica, del que se ha dicho que puede ser el espacio utilizado por los guerrilleros desmovilizados para participar en política.
La exsenadora Córdoba, destituida e inhabilitada por la Procuraduría en 2010 por supuestos vínculos con las FARC, reclamó la implantación de "un sistema electoral confiable, transparente y con voto electrónico".
También planteó una "apertura del sistema democrático" que, en su opinión, "está establecido únicamente para beneficiar al establecimiento que se expresa a través de los partidos tradicionales".
