Norteamericano fue engañado con falsa niña y falso secuestro
Las autoridades pusieron todas las evidencias a disposición de un juez. La mujer involucrada podría enfrentar cargos por falsificación de documento, falsa denuncia y estafa.
El Gaula de la Policía logró esclarecer que la menor que supuestamente había sido raptada el fin de semana en Bogotá no era hija de la mujer que lo aseguraba, y hacía parte de un plan para engañar a un norteamericano.
Luego de recibir la denuncia del rapto, la Policía presionó a la mujer con los videos de seguridad del hotel y los de su llegada a Bogotá, demostrando que lo que ella cargaba era un bulto, y no una menor de edad.
Al verse presionada, la mujer aseguró que la niña se encontraba en Cali mintiéndoles nuevamente a las autoridades y, finalmente, informó que la niña se encontraba en Santander de Quilichao (Cauca).
Cuando las autoridades llegaron a dicha población, encontraron a la bebé que había sido reportada como raptada, pero encontraron que tenía otros padres completamente diferentes.
Según indicó la Policía, la mujer había engañado con un falso embarazo a un extranjero y había pedido la bebé prestada a una familia para tomarse fotos con ellas y enviarlas al ciudadano norteamericano, con el objetivo de que este enviara dinero para la manutención de la niña.
Igualmente, la mujer pedía prestada a la menor para comprarle ropa en Cali, ponerle vacuna e, incluso, había planteado la posibilidad de llevarla a Estados Unidos para realizarle un plan médico completo.
Las autoridades pusieron todas las evidencias a disposición de un juez, quien decidirá si la mujer podría enfrentar cargos por falsificación de documento (había registrado a la bebé a su nombre), falsa denuncia y estafa.
Luego de recibir la denuncia del rapto, la Policía presionó a la mujer con los videos de seguridad del hotel y los de su llegada a Bogotá, demostrando que lo que ella cargaba era un bulto, y no una menor de edad.
Al verse presionada, la mujer aseguró que la niña se encontraba en Cali mintiéndoles nuevamente a las autoridades y, finalmente, informó que la niña se encontraba en Santander de Quilichao (Cauca).
Cuando las autoridades llegaron a dicha población, encontraron a la bebé que había sido reportada como raptada, pero encontraron que tenía otros padres completamente diferentes.
Según indicó la Policía, la mujer había engañado con un falso embarazo a un extranjero y había pedido la bebé prestada a una familia para tomarse fotos con ellas y enviarlas al ciudadano norteamericano, con el objetivo de que este enviara dinero para la manutención de la niña.
Igualmente, la mujer pedía prestada a la menor para comprarle ropa en Cali, ponerle vacuna e, incluso, había planteado la posibilidad de llevarla a Estados Unidos para realizarle un plan médico completo.
Las autoridades pusieron todas las evidencias a disposición de un juez, quien decidirá si la mujer podría enfrentar cargos por falsificación de documento (había registrado a la bebé a su nombre), falsa denuncia y estafa.