Santos dice sentir 'vergüenza' por quienes lo acusan de haber comprado el Nobel

El presidente de la República, Juan Manuel Santos, rechazó tanjanmente las afirmaciones relacionadas con que el premio nobel con el que fue galardonado este sábado, habría sido comprado entre Santos, Fidel Castro y Hugo Chávez. 

La confrontación se presentó en el momento en el que el primer mandatario se encontraba en una rueda de prensa con la primera ministra de Noruega, Erna Solberg. 

Según señalan varios medios, la entrega del Nobel de Paz a Santos podría haber estado relacionada con 'preferencias o negocios con la empresa petrolera que representarían directivos del Comité del Nobel'.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo inmediatamente que le avergüenzan los comentarios del expresidente Álvaro Uribe y otros sectores críticos de que el Nobel de la Paz que ha recibido por sus esfuerzos por acabar con la guerra fue comprado.

"Me da vergüenza como colombiano escuchar eso", dijo Santos en una rueda de prensa conjunta en Oslo con la primera ministra noruega, Erna Solberg, un día después de haber recibido el premio, que le fue otorgado en octubre.

Santos destacó que se habían dicho muchas cosas de él, como que era "comunista, miembro de las FARC o aliado de Fidel Castro para introducir una revolución", pero que "lo más absurdo" era afirmar que ese galardón había sido comprado, por lo que no merecía más comentarios.

"Uno no puede comprar un Premio Nobel de la Paz ni los otros premios académicos. Son otorgados por un comité independiente que actúan con un alto nivel de integridad", afirmó Solberg.

La primera ministra aludió también a la independencia de ese organismo para no comentar por qué las FARC no habían sido premiadas con el Nobel, aunque resaltó que su papel en el proceso fue reconocido en los discursos pronunciados ayer en la ceremonia, tanto por Santos como por la líder del Comité Nobel.

El presidente de Colombia no ocultó la alegría que para él había supuesto a título personal la ceremonia celebrada en el ayuntamiento de Oslo y el resto de homenajes recibidos a lo largo de la jornada.

"Ayer fue el mejor día de mi vida", admitió.