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Periodista de Boyacá denuncia presiones para hablar a favor del gobernador Carlos Amaya

La Fundación para la Libertad de Prensa señaló el hecho como lamentable, exigiendo transparencia en las relaciones entre medios y Gobierno.

Periodista de Boyacá denuncia censura y presiones en su ejercicio de comunicadora. Foto: Colprensa

Periodista de Boyacá denuncia censura y presiones en su ejercicio de comunicadora. Foto: Colprensa(Thot)

La denuncia pública se realizó cuando la periodista Gina Julieth Rojas, quien se desempeñaba como editora del diario Extra Boyacá, perteneciente al Grupo Editorial El Periódico, indicó que desde la dirección del medio de comunicación se le pedía realizar su trabajo de acuerdo a directrices estipuladas en un memorando, que presentó abiertamente en sus redes sociales donde se sugiere apoyo al gobierno departamental.

“Se les había manifestado la ayuda total y directa al gobernador Carlos Andrés Amaya, porque estamos convencidos de la capacidad, inteligencia y profesionalismo de llevar adelante el departamento para un mejor mañana de los boyacenses. Por lo tanto, debe salir una noticia semanal de todo lo que está haciendo (…) en ningún momento criticando de él o de su gobernación”, indica el documento que está firmado por el director Hernando Suárez Burgos, que a su vez iba dirigido tanto a Rojas, editora del diario Extra Boyacá, como a su administrador, Edilberto Patarroyo.

Con el título “Censurar a la prensa también es corrupción”, la comunicadora social compartió un comunicado directamente a la Fundación para la Libertad de Prensa, en el que indicó que el memorando recibido iba en contra de sus convicciones y ética, y que al no aceptar poner su firma en él,  un día después, solicitaron su carta de renuncia a lo cual también se negó en aceptar.

“Teniendo en cuenta que estampar mi rúbrica en dicho documento era aceptar realizar un periodismo acomodado favoreciendo al gobernador, en contra de mis convicciones y ética, me negué a firmarlo. Al día siguiente, 20 de julio, por no firmar el documento, me solicitaron mi carta de renuncia que también me negué a presentar, ante lo cual decidieron consultar con el gerente nacional y me informaron que mi contrato iría hasta el 30 de julio con las funciones como editora de Extra Boyacá”, declaró la denunciante en el documento.

“Al día siguiente, 21 de julio, verbalmente me comunicaron que era degradada a periodista judicial, puesto en el que me había desempeñado desde febrero de 2014 hasta marzo de 2016”, cuenta Rojas.

La periodista indicó que debido a una presión psicológica rotulada como “mordaza”, para controlar contenidos, fue el detonante para hacer públicas las conductas dentro del medio de comunicación indicando que los hechos son un atentado contra la libertad de prensa y expresión.

Por su parte, la Fundación para la Libertad de Prensa indicó que es preocupante la situación presentada con la periodista Gina Rojas, donde el Diario Extra le solicita su renuncia por no hablar bien de la gestión del gobernador de Boyacá, situación que indica fue confirmada por los directivos.

“Con esta decisión, el diario Extra se aparta de los valores de independencia de los medios de comunicación con respecto al Estado e impone una orden que va en contra de la vocación democrática de la libertad de prensa. Al respecto, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que “es fundamental que los periodistas que laboran en los medios de comunicación gocen de la protección y de la independencia necesarias para realizar sus funciones a cabalidad, ya que son ellos quienes mantienen informada a la sociedad, requisito indispensable para que ésta goce de una plena libertad y el debate público se fortalezca”, señaló la Flip.

“Esta situación se agudiza si tenemos en cuenta que el señor Hernando Suárez Burgos es dueño de 23 medios de comunicación en distintas regiones del país. Por esta razón, la Flip invita al señor Suárez Burgos a indicar con cuáles administraciones tiene una afinidad similar a la que defiende con respecto al gobernador de Boyacá”, concluyó la Flip en el comunicado de prensa que fue compartido en sus diferentes plataformas tecnológicas.

Luego de la denuncia, la Gobernación de Boyacá, en cabeza de Carlos Andrés Amaya como mandatario departamental, indicó que rechaza los hechos sucedidos con la periodista en mención y afirmó que no existe ninguna injerencia en las decisiones del medio de comunicación.

“Manifiesto mi respeto por la periodista Gina Rojas, quien, con su actuación al no acceder a peticiones que atentan contra la libertad de prensa, ha dado una lección de entereza personal y profesional”, declaró el gobernador Amaya.

Señaló además que está dispuesto a defender los principios de transparencia y libertad de prensa pidiendo pruebas que vinculen a la Gobernación de Boyacá con actos de corrupción frente al manejo de los medios de comunicación: “Hago un llamado a que, si hay pruebas directas, y no documentos de terceros, que me comprometan con injerencia o intento de censura o manipulación de la información, se den a conocer a las autoridades, a la opinión pública y a los organismos que defienden el derecho a la libertad de prensa y sus agremiaciones de forma inmediata”.

El mandatario regional concluyó haciendo un llamado a realizar debates públicos bajo el principio ético y abierto ante todos los agentes que estén alrededor.

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