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Diócesis alerta sobre drama de Tumaco por violencia

La diócesis denuncia el acoso de bandas criminales y de la guerrilla de las Farc a la población, la omisión de las autoridades locales, regionales y nacionales.

La diócesis de

Tumaco

hizo un dramático llamamiento al Gobierno para que proteja la vida de los habitantes de ese puerto sobre el Pacífico, agobiados por acciones y amenazas de grupos armados y atentados terroristas.



En un comunicado publicado bajo el título "

Tumaco no descansa

", la diócesis denuncia el acoso de bandas criminales y de la guerrilla de las Farc a la población, la omisión de las autoridades locales, regionales y nacionales y el abandono del Estado a este municipio de unos 105.000 habitantes.



"Los últimos acontecimientos muestran que no hay un día en que Tumaco descanse", señala el mensaje, que enumera un rosario de problemas con los que tienen que convivir a diario los habitantes de Tumaco y de la costa pacífica del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador.



Según la diócesis, al alto número de homicidios se suman la extorsión masiva, los ataques terroristas contra las torres de electricidad y en la carretera que comunica con Pasto, la capital regional, la carestía de los alimentos y la gasolina, sin que las autoridades hagan algo.



"Tumaco sufre desde el 3 de octubre por la falta de energía" por los ataques de las Farc a las torres de transmisión eléctrica, situación que ha causado escasez de agua porque las plantas de bombeo no pueden funcionar y grandes pérdidas al comercio local, señala el comunicado.



De la misma forma, denuncia: "La extorsión se ha convertido ya en una enfermedad crónica del municipio para grandes y pequeños comerciantes" y de la cual no se salvan ni los hospitales ni los trabajadores sanitarios.



"Los homicidios continúan de manera alarmante. Desde enero a septiembre del presente año se han producido 178 muertes violentas solo en el Municipio de Tumaco. Pero además continúa el reclutamiento forzado de menores y las amenazas", agrega el comunicado.



Según la diócesis, los políticos y hasta el presidente Juan Manuel Santos han prometido soluciones, "pero seguimos sin alternativas para la seguridad, energía y una de las tasas de desempleo más altas del país".



Ante el abandono, habitantes de varios barrios se unieron el pasado 27 de septiembre para expulsar de sus comunidades "a los actores armados" y entregaron a la Policía a siete integrantes de la banda criminal

Los Rastrojos

, pero en una acción "deplorable e injustificable", la Fiscalía dejó en libertad a cuatro de ellos con el argumento de que por ser viernes había sólo un fiscal, agrega.



Como consecuencia, esos delincuentes tienen amenazados de muerte a los habitantes del barrio Panamá, que desde entonces "no duermen montando rondas cívicas por las noches. Están confinados en su propio barrio y no pueden salir a sus puestos de trabajo".



Ante esa situación, la Diócesis de Tumaco pide a las autoridades "acciones urgentes" para proteger la vida de los habitantes de los barrios Panamá, Nueva Floresta, Buenos Aires y otros también amenazados, y a la Fiscalía General de la Nación y otras instituciones de control, "que investiguen detenidamente el papel que la Fiscalía y juzgados cumplen en Tumaco".



Igualmente pide a los organismos internacionales, en especial a la ONU, que hagan un seguimiento a la situación y al Gobierno "soluciones de fondo y concretas" para los problemas denunciados.



"Exigimos a los grupos armados Los Rastrojos, a las Farc y a cualquier otro grupo armado, que no involucren a la sociedad civil en dicho conflicto", agrega el comunicado, que también les exige el cese de los atentados a los servicios públicos como energía y agua y que no pongan más bombas en las carreteras para que las personas puedan transitar libremente.

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