JEP acepta a militar por “positivo” al que pusieron pantalón que le quedaba grande
El tribunal transicional ordenó al sargento Correa Pechene aclarar si aceptará o no responsabilidad por ese homicidio en el que la víctima, un agricultor, fue presentada como “muerte en combate” y donde su cuerpo muestra incluso tortura.
Imagen de referencia de conmemoraciones por desaparición extrajudicial. Foto: Colprensa. / Colprensa
La Sala de Definición de la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, aceptó el sometimiento del sargento viceprimero del Ejército Héctor Fabio Correa, procesado por la ejecución extrajudicial de un agricultor llamado Jairo García Muñoz, a quien tropas del batallón Atanasio Girardot en 2004 (periodo en el que el general (r) Juan Pablo Forero era el comandante del batallón) fusilaron y presentaron falsamente como baja en combate.
De acuerdo con el expediente, la escena del crimen delató a los mismos perpetradores, luego de que tras el supuesto “combate” el cuerpo del labriego fuera encontrado con un pantalón que no presentaba orificios de bala, además le quedaba grande y para completar tenía puestas unas botas limpias y completamente nuevas.
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“En diligencia de levantamiento al cadáver se advierte que el pantalón de camuflado que portaba no presentaba ningún impacto de proyectil, estaba limpio, es una talla demasiado grande para la contextura del cadáver y las botas de caucho que portaba igualmente estaban limpias”, señala el expediente contra Correa y otros militares, citado por la JEP.
Pero la evidencia no termina ahí, además, la víctima presentaba señales de tortura como la amputación de una parte de uno de sus dedos, tenía los disparos a pocos metros de distancia, y le colocaron un fusil que pertenecía al Ejército y había sido descontinuado en 1989.
Así las cosas, los magistrados le solicitaron al militar que allegue un plan de aporte a la verdad satisfactorio, en el que primero que todo aclare si aceptará o no responsabilidad por el crimen, luego de que se señalara a sí mismo como un hombre “respetuoso” de la ley y los derechos humanos y que estaba a la distancia cuando ocurrieron los hechos.
“...se requerirá al compareciente para que, de aceptar responsabilidad, presente sus propuestas de reparación en los términos descritos y aquellos que se requieran para su debida implementación, advirtiéndole sobre la rigurosidad y seriedad con la que debe asumir este proceso” indica la determinación.
La jurisdicción dio un término de diez días al compareciente para cumplir con lo solicitado.
