La inclusión laboral es un orgullo para Colombia

Desde el 2006 Alkosto y Ktronix trabajan, junto a Best Buddies Colombia, vinculando laboralmente a jóvenes con discapacidad cognitiva

El mundo laboral puede ser exigente, retador y complicado; cuando se trata de personas con algún tipo de discapacidad tiende a ser más difícil, incluso, llegando a ser excluyente. Por esta razón es importante abrir espacios seguros hacia esta población. Alkosto y Ktronix decidieron, en septiembre del 2006 y junto a la fundación sin ánimo de lucro Best Buddies Colombia, crear el programa “Desarrollo de oportunidades laborales”.

Ya son 15 años ininterrumpidos en que cientos de familias se han visto beneficiadas por este programa. Al momento de su creación se vincularon 54 jóvenes como empacadores en cuatro tiendas Alkosto del país. Al día de hoy, hay 123 personas trabajando como empacadores, asesores de venta y surtidores en las diferentes secciones.

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Manuel Espinal tiene discapacidad cognitiva y trabaja en Alkosto desde hace 12 años. Según él, su vida cambió cuando ingresó a la compañía: “antes yo trabajaba en la calle como vendedor ambulante, trabajaba en pizzerías de 7 de la mañana a 1 de la mañana. Todo cambió al tener sueldo: poder comprar mis cosas. En Alkosto pude comprar mi apartamento”.

Como el de Manuel, hay cientos de casos donde los beneficiados han podido crecer y fortalecerse a nivel personal y laboral. Así mismo, de manera directa e indirecta, el círculo de estos empleados se ha visto beneficiados con estas oportunidades.

“Me han dado la oportunidad de trabajar, de salir adelante con mi familia. Ellos están contentos de que yo esté bien preparada para trabajar. Mi experiencia ha sido un sueño: tener un puesto fijo, poder comprar mi casa propia”, comenta Adriana Pérez, quien trabaja allí desde el 2010. Actualmente, Adriana se desempeña como empacadora en Alkosto de la Avenida 68 en Bogotá.

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Otro ejemplo es el de Gina Marcela Largo, quien también relata su experiencia: tiene un apartamento en Mosquera que actualmente está arrendado, se moviliza en una moto que compró hace algún tiempo y tiene a sus papás como beneficiarios.

Acompañando esta labor, Alkosto creó una alianza con el SENA donde desarrollaron programas de educación especializados en personas con discapacidad. Allí crearon dos cursos para capacitar a quienes ingresan a la empresa. Desde hace dos años, los empleados que finalicen el programa de Auxiliar de Empaque y Embalaje de Objetos tienen la oportunidad de continuar con su educación en este tema recibiendo la titulación como técnicos en Desarrollo de Operaciones Logística en cadena de abastecimiento, especializándose en este oficio.

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María Isabel Morcillo, directora de desarrollo y responsabilidad social de Alkosto y Ktronix, comenta que con este estilo de formación dual (estudiando y aplicando lo que aprenden mientras trabajan), no solo se contribuye a su aprendizaje y desarrollo personal, sino que se brinda la oportunidad de fortalecer sus hojas de vida para poder aplicar sus conocimientos y experiencia en otros espacios laborales. Bajo esta modalidad de contrato de aprendizaje, se han beneficiado a más de 250 jóvenes con un título de formación avalado por el SENA.

Día a día es necesario generar conciencia en la sociedad, lograr que los diferentes tipos de discapacidad sean visibles es un deber de todos. Alkosto ha apadrinado esta población vulnerable de Colombia para darles acceso al mercado laboral y oportunidades de formación.

Apoyar y trabajar en la inclusión y en la generación de oportunidades es una responsabilidad para construir capital social y es un orgullo para Colombia.