EPM se convirtió en la primera distribuidora de energía de Centroamérica con la adquisición mayoritaria de las empresas Delsur, de El Salvador, y Ensa de Panamá. Sumando EEGSA, de Guatemala, propiedad desde 2010. La inversión global por ambas empresas ascendió a US$200 millones, con mercados en Panamá y El Salvador que completan 680 mil clientes y 3.600 GWh de demanda de energía anual. Las operaciones quedaron finiquitadas luego de que se hicieran efectivos los pagos por US$135 y US$65 millones, respectivamente, a la firma AEI, con la cual EPM suscribió un acuerdo de compra por las dos empresas el pasado 19 de enero.