<strong>Pregunta.</strong> ¿Un músico que deja el mercado discográfico? <strong>Respuesta.</strong> ¿Por qué publicar discos? Me siento más artista que nunca, más seguro de mi voz y de mi guitarra. <strong>P.</strong> ¿No editará más discos? <strong>R. </strong>No lo sé. De momento prefiero tocar en bares. Llego a menos gente pero se crean ambientes mágicos. La vida real es fabulosa. <strong>P. </strong>Pese a la globalización todo es cada vez más pequeño: salas, giras, ventas, público... <strong>R. </strong>Sí, y buscar una solución global está fuera de mi alcance, me rindo; pero existen soluciones a escala local. <strong>P.</strong> Deme un ejemplo. <strong>R.</strong> El huerto. Es autoabastecimiento, trueque, relación humana, es revolución. Tocar en bares es otro ejemplo. La semana pasada toqué en tres. <strong>P.</strong> ¿Los bares cambian? <strong>R.</strong> Sí, ahora hay móviles. Me fastidia ver a la gente grabando, es algo desesperante, terrible para la fiesta. Hay una mesa de cinco y no gritan o bailan, graban. Y no uno para los demás, ¡graban los cinco! Tengo que escribir una canción sobre ello. <strong>P. </strong>¿Hace planes a largo plazo? <strong>R.</strong> A tres meses. No más allá, el mundo cambia muy rápido. <strong>P.</strong> Fuerce su previsión, ¿cómo se ve a los 60? <strong>R. </strong>Mi plan es estar en forma, tener salud. Juego tres partidillos de fútbol a la semana con los del barrio y procuro comer sano. Y dejando los grandes escenarios. Con 60 años no me veo dando botes sino en los bares, trabajando más con la emoción que con el físico. <strong>P. </strong>Si le pagan por promocionar productos ecológicos, ¿qué dice? <strong>R.</strong> Sospecho del dinero, la publicidad es dinero. Diría que no. Ya no visto camisetas de fútbol, me cansé de borrarles la publicidad. <strong>P.</strong> Le nombran jefe de Gobierno. Primera medida. <strong>R.</strong> La educación. En eso se ha de trabajar mucho. Hay que rearmar la educación pública y que esta amplíe su campo de acción. Debemos educar de otra manera: alimentación, salud, consumo responsable... <strong>P.</strong> ¿Qué le diría al Gobierno? <strong>R.</strong> Que se está siendo muy cruel con la gente. Hay que garantizar al pueblo un mínimo de dignidad, una casa y trabajo. Si no se creará resentimiento, radicalización, rabia y, al final, violencia. <strong><br> P.</strong> ¿Y a un desahuciado? <strong>R. </strong>No sé. Le cantaría El circo caliente de Gato Pérez. No solucionaría nada pero esa es la tarea del músico: acompañar y aliviar en los malos momentos. <strong>P. </strong>Hábleme de sustancias tóxicas. <strong>R.</strong> El azúcar. Mata a muchísima gente y nos lo meten en todo. <strong>P.</strong> ¿Y el peor hábito? <strong>R.</strong> El consumismo, solo agota los recursos. Una sociedad cuya máxima es consumir tiene algo que falla. De ahí los huertos, permiten que la verdura producida sea verdura que el barrio no compra a la industria agroalimentaria. Y es mejor y más barata. Es un detalle, pero tocas los huevos más que de mani. El sistema se pone tenso cuando no compras. <strong>P. </strong>Pero la ecología se está convirtiendo en moda. <strong>R. </strong>Resulta tan evidente como que no te puedes plantear ningún futuro sin principios ecológicos. <strong>P.</strong> ¿Hay comida para todos? <strong>R.</strong> No soy un experto, pero creo que comiendo mejor, repartiendo mejor y cultivando con respeto la tierra, sí. Si el camino lo marca la industria agroalimentaria, en 20 años nos lo comemos todo. <strong>P.</strong> ¿Cuando se comió la última hamburguesa? <strong>R.</strong> No me acuerdo, pero también las como, ¡eh! De vez en cuando mola una buena guarrada. <strong>P.</strong> ¿Tiene distancia sobre sí mismo? <strong>R. </strong>Sí, he aprendido con el tiempo. De joven te tomas muy en serio, pero acabas aprendiendo a reírte de ti mismo, de lo que eres. Desde que acepto los chistes sobre mí me siento mejor. <strong>P.</strong> Me parece que debe ser difícil trabajar con usted. <strong>R.</strong> Lo fue, pero ahora no tanto, he aprendido a relativizar y acepto mejor los defectos de los demás. <strong>P.</strong> ¿Sigue leyendo Le Monde Diplomatique? <strong><br> R</strong>. Sí, ahí está mi padre, Ramón Chao, colaborando. Me gusta. <strong>P. </strong>¿Y no le deprime? <strong>R.</strong> La lucidez siempre tiene un punto depresivo. <strong>P. </strong>¿Se da cuenta que habla como una persona mayor? <strong>R.</strong> Sí claro, es que lo soy. Mayor y feliz de la vida, me siento superbien, equilibrado, en paz conmigo mismo.