<div style="text-align: justify">Son unas lagunas negras y llenas de pastizales en el corazón de la ciudad estadounidense de<strong> Los Ángeles</strong>. Muchos saben que están allí por el inconfundible olor a brea caliente que irrumpe apenas uno transita por la llamada <strong>Milla Milagrosa</strong>, una zona urbana elegante y bien cotizada.<br> <br> Pero no todos conocen la importancia de estos charcos de brea y sus secretos de la <strong>última Era del Hielo</strong>: es uno de los yacimientos más ricos en el mundo en fósiles de especies que vivieron entre 11.000 y 50.000 años atrás.<br> <br> Este año se cumplen cien años desde que comenzaron las primeras excavaciones en<strong> La Brea Tar Pits</strong>, como se las llama, pero la actividad sigue sin pausa: desde 2006, los científicos están enfrascados en revisar cajas gigantes de restos asfálticos que contienen desde pequeños microorganismos -los que permiten conocer detalles del ecosistema de la región- hasta un mamut casi intacto, bautizado Zed.<br> <br> El llamado "<strong>Proyecto 23</strong>" podría casi triplicar la colección de fósiles hasta ahora extraídos de las lagunas. Valeria <br> </div>