Contrarreloj

Programas

Fogones en la Chichería Demente de Bogotá

Fogones en la Chichería Demente de Bogotá

Bogotá

En esa búsqueda por encontrar algo rico, pero casero, terminé en el 7 de agosto. Alguien que aprecio bastante me había recomendado la Chichería Demente. Me fui a la calle 69 con carrera 15, apenas a dos cuadras de la Caracas donde quedan la mayoría de talleres de mecánica.

Me topé con una casa esquinera bien antigua, con un techo altísimo, yo creería que tipo de los años 20. Cuando ingresé inmediatamente me sentí en un piqueteadero, pero con mucho estilo; usted ve chorizos colgados por todo lado, también está el Divino Niño Jesús, papas criollas fritándose, alcancías de barro, los famosos canastos de Fúquene, pero lo que más me encantó fueron dos cosas; el olor contundente a comida que le abre el apetito a cualquiera y la música por supuesto sensacional, salsa, grupo Niche, Tupamaros y uno que otro bolero.

Ya entrada en gastos, me senté a disfrutar la carta y aquí la frase menos es más, no aplica para nada porque los platos son muy generosos. Aunque la variedad del menú es muy grande, la especialidad del chef es 100% colombiana. Por ejemplo, las papas Chiriadas, como las llaman, don de ataque, un hogao de dioses con queso. También probé las empanadas de lechona, eso sí hay que decir que mantienen el sabor intacto y muy fiel a la propia lechona.

Otro de los platos ganadores, los chicharrones: chiquitos sustanciosos, carnosos y muy crocantes. Las carimañolas con suero costeño, frijoles de Montes de María que es la típica frijolada colombiana, pero la sorpresa es que aquí se la sirven con un plato de arroz con pega, esa que tanto les gusta a las personas. Otra recomendación, son empanadas de maduro, y las mollejas que vienen acompañadas de limón y alcaparras fritas.

Pero si nada de eso le gusta también puede encontrar otras opciones como gambas, mariscos, pescados de todo tipo, codillo de cerdo, cordero asado en salsa de suero, chuletón; definitivamente hay para todos los gustos.

Lo rico de este lugar es que usted venga a compartir, porque todo se sirve al centro mientras usted charla y disfruta. “Cuando alguien viene a Chicheria Demente queremos que se sienta en el ambiente de las casas de antes, alrededor del fuego de la cocina, de la buena compañía y de los amigos. Queremos que sienta que está en un lugar donde cabe todo el mundo, donde caben especialmente los buenos momentos y las buenas experiencias”, afirmó Natalia Carreño, socia de esta demencia.