Absuelven a jóvenes procesados por acoso sexual a mujer en estado de embriaguez
Por falta de pruebas, la Corte Suprema de Justicia absolvió después de 10 años a dos jóvenes que hicieron presuntos tocamientos a una mujer en un taxi.
Imagen de referencia de conductor. / Cris Cantón
Colombia
Hace diez años, un taxista fue testigo clave para denunciar presuntos tocamientos indebidos y acoso sexual de dos hombres en contra de una mujer, quienes estaban con alto grado de embriaguez.
Después de que el taxista acudiera a la Policía, los agentes señalaron que la mujer estaba semidesnuda e inconsciente, por lo que fue trasladada a un hospital.
Aunque ambos jóvenes fueron condenados por el Tribunal Superior de Bogotá en 2018, cuando el caso llegó a la Corte Suprema de Justicia, el alto tribunal decidió absolverlos.
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Los argumentos de la Corte tienen que ver con el estado de inconsciencia de las personas que se encontraban al interior del taxi. En un principio, aunque se dijo que la mujer estaba totalmente inconsciente, ella sacó su celular en el trayecto al hospital desde donde pudieron contactar a su mamá.
Por otra parte, dice el fallo que los uniformados presentaron versiones contradictorias en aspectos sustanciales sobre la utilización del teléfono de la joven. Dicen que falta de recuerdos de la mujer tiene que ver con su estado de embriaguez, lo que, según la Corte, no dejó comprobar el delito de acto sexual abusivo con incapacidad de resistir.
Ello, señala el fallo de la Corte, bajo el entendido de que no existe una necesaria coincidencia entre la inconsciencia a la que aluden los policiales y la falta de recordación expuestas por la joven y por el toxicólogo que declaró a instancia de la Fiscalía General de la Nación. Por eso, “no es extraño que, por ejemplo, una persona no recuerde todo lo que hizo mientras estaba embriagada”.
Dice el alto tribunal:
“Existe un vacío en lo que concierne a la actitud y/o reacción de los procesados al percatarse de que el taxista arribó abruptamente a un retén policial y se bajó del vehículo para contarles a los uniformados lo que venía sucediendo, pues se da a entender que continuaron abrazados a la joven semidesnuda y que incluso se dedicaron a tocar sus senos en ese preciso momento, lo que se contrapone a la tendencia de ocultarse que usualmente se presenta en esta clase de ilicitudes”.
