JEP imputa a excomandante de Ejército Jaime Lasprilla y 4 generales por falsos positivos
Dentro de los acusados se encuentra el general (r) Miguel Pérez Guarnizo, exdirector de la Defensa Civil, así como el general (r) Edgar Rodríguez Sánchez, excomandante del Comando Conjunto Tercero para la época de la llamada masacre de Alto Remanso en 2022.
Jaime Lasprilla (colprensa), Miguel Pérez Guarnizo (cortesía JEP) y Edgar Alberto Rodríguez (cortesía Ejército).
La Sala de Reconocimiento de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) imputó al excomandante del Ejército, general (r) Jaime Lasprilla Villamizar, en su calidad de excomandante de la Novena Brigada, y otros 4 generales de la república por cerca de 200 falsos positivos ocurridos en el Huila entre 2005 y el 2008 (192) por unidades de la Novena Brigada: Batallón Magdalena, Batallón Pigoanza y las Fuerzas Especiales (AFEUR) de Neiva.
Los otros altos oficiales que fueron llamados a reconocer responsabilidad por dichos homicidios en su calidad de excomandantes de la Brigada 9 son el general (r) Miguel Pérez Guarnizo (también exdirector de la Defensa Civil), así como el general (r) William Pérez Laiseca.
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“Las actuaciones de los tres altos oficiales transmitieron la percepción que desde la Brigada 9 se permitía el lanzamiento irregular de operaciones para perpetrar homicidios bajo la modalidad de combate simulado y, con ello, que era posible acudir al pago irregular de recompensas para financiarlos”, señaló la JEP.
Por el lado de los batallones, dos generales también fueron llamados a responder en su calidad de excomandantes del Batallón Magdalena: el general (r) Edgar Rodríguez (Hasta hace poco comandante del Comando Conjunto Tercero para la época de los hechos de Alto Remanso) y el general (r) Marcos Evangelista Pinto Lizarazo. Además de ellos, otros 14 exmilitares de esa unidad fueron imputados por esos homicidios, entre quienes resaltan dos mayores activos: Félix Juan Carlos Araque y Julián Andrés Calderón.
Frente al Batallón 26 Cacique Pigoanza, un total de 14 exmilitares fueron acusados de crímenes de guerra y lesa humanidad; allí aparecen los nombres de dos coroneles activos: el coronel (r) Alejandro León Campos y el coronel (r) Faiver Coronado Camero.
“En el caso de los mayores generales (r) Édgar Alberto Rodríguez Sánchez y Marcos Evangelista Pinto Lizarazo, junto a los 30 comparecientes que se desempeñaron como integrantes de los pelotones, comandantes de pelotón y compañía de las cuatro unidades priorizadas, todos deben responder a título de coautores por los crímenes que se les imputan. La Sala considera que esos uniformados siguieron un acuerdo común, con división del trabajo criminal e hicieron aportes esenciales en las fases de planeación, ejecución y encubrimiento de los hechos”, concluyó la JEP.
Adicionalmente, el magistrado Alejandro Ramelli, relator de la investigación, mencionó el pobre desempeño de la Justicia Penal Militar, así como de la Fiscalía en detener la máquina delincuencial desplegada por los soldados y sus superiores, sin ascender a un grado elevado de responsabilidad y adelantando pocas investigaciones (solo 10 personas fueron condenadas en la justicia ordinaria).
