“La perseverancia fue clave”: Adriana Hinestroza, piloto de motocross

Este sábado, 24 de mayo, llegó a los micrófonos de W Fin de Semana, la caleña Adriana ‘Nana’ Hinestroza, la primera piloto de motocross en Colombia para hablar de su experiencia y su camino por este deporte.

Hinestroza explicó que su gusto por las motos surgió por su padre, un apasionado por las motos. Todo surgió cuando la motociclista tenía 7 años y vio la moto de su hermano “malparqueda”, se subió a ella y empezó a manejar, su papá evidenció que lo hacía bien y notó en ella un talento.

Su camino en el motocross fue complicado al inicio, ya que en Colombia no había una categoría para mujeres. En la primera competencia no la querían dejar jugar, por lo que su papá luchó para que le permitieran competir con los niños, y en esta carrera quedó en el segundo lugar, y desde entonces confirmaron que Hinestroza contaba con una habilidad para el manejo de motos.

La motociclista duró 10 años compitiendo contra hombres, y esos mismos compañeros la hacían caer. En las competencias había personas que no apostaban por Hinestroza, le hacían bullying y por esto se cuestionaba si estaba en el lado equivocado.

Mientras tanto, su papá le aseguraba que ella podría ser quien quisiera y siempre la acompañaría, por lo que el apoyo de su familia le permitió convertirse en lo que es ahora, la primera piloto de motocross colombiana.

Hinestroza lleva 30 años en el mundo de las motos, y en su trayecto notó que siempre le han hecho creer que el mundo de las motos es para hombres, por lo que vio esa falta de apoyo y oportunidades para las mujeres en este deporte y empezó con su escuela de motocross.

Su escuela se enfoca en niñas y mujeres, aunque los hombres también pueden participar. Este proyecto cuenta con motos, indumentaria y demás elementos necesarios para realizar motocross. Todo el mundo empezaba a compartir, y se convirtió en algo más experiencial.

¿Qué tipo de mujeres llegan a su escuela de motocross?

Hinestroza afirmó que en su escuela no solo llegan deportistas sino también ejecutivas, mujeres con vidas sedentarias y quienes nunca se han subido a una moto.

Además, su escuela también maneja un concepto de mototerapia, en el que incluso participan mujeres que acaban de pasar por rupturas amorosas.

Este espacio de motocross, en el que la moto se vuelve como la excusa para compartir, conectarse, y reencontrarse con una misma.

Escuche esta entrevista en W Fin de Semana:

Escuche W Radio en vivo: