Gobierno y campesinos firmaron el primer acuerdo en el Catatumbo
Luego de la crisis que mantuvo a la región convulsionada durante dos meses, se acordaron soluciones para 400 familias cuyos cultivos ilícitos fueron objeto de erradicación.

Bruce Mcmaster. Foto: Colprensa.(Thot)
El director del Departamento para la Prosperidad Social, Bruce Mcmaster, anunció que se firmó una estrategia para la “posterradicación y la fase inicial de la intervención para la estabilización socio económica del Catatumbo”, como parte del proceso de sustitución de cultivos ilícitos y el desarrollo alternativo de la región.
Este programa está inicialmente dirigido a un grupo de 400 familias, cuyos cultivos ilícitos fueron objeto de erradicación, así como a los recolectores de hoja de coca en esta zona de Norte de Santander.
Los acuerdos comprenden 5 frentes de acción: base para el sostenimiento económico, la asistencia alimentaria, el empleo de transición, la seguridad alimentaria y nutricional, y la formulación e implementación de un proyecto productivo.
El Gobierno destinó 3.300.000 pesos para estas familias a través de 3 entregas cada una por 1.100.000 pesos. La oficina de las Naciones Unidas contras las Drogas validará el censo de las personas beneficiadas y garantizará el pago de los recursos.
Los recolectores de hoja de coca serán beneficiarios del componente de empleo de transición por seis meses con un salario mínimo legal vigente, así como una asistencia alimentaria de 4 mercados.
Así mismo, las familias incluidas en estos acuerdos harán parte de una programa de sustitución de cultivos ilícitos en el marco de una segunda fase donde se trabajará “un laboratorio de paz” para analizar temas estructurales como las zonas de reservas campesinas.
Autor: Andrea Díaz.
Este programa está inicialmente dirigido a un grupo de 400 familias, cuyos cultivos ilícitos fueron objeto de erradicación, así como a los recolectores de hoja de coca en esta zona de Norte de Santander.
Los acuerdos comprenden 5 frentes de acción: base para el sostenimiento económico, la asistencia alimentaria, el empleo de transición, la seguridad alimentaria y nutricional, y la formulación e implementación de un proyecto productivo.
El Gobierno destinó 3.300.000 pesos para estas familias a través de 3 entregas cada una por 1.100.000 pesos. La oficina de las Naciones Unidas contras las Drogas validará el censo de las personas beneficiadas y garantizará el pago de los recursos.
Los recolectores de hoja de coca serán beneficiarios del componente de empleo de transición por seis meses con un salario mínimo legal vigente, así como una asistencia alimentaria de 4 mercados.
Así mismo, las familias incluidas en estos acuerdos harán parte de una programa de sustitución de cultivos ilícitos en el marco de una segunda fase donde se trabajará “un laboratorio de paz” para analizar temas estructurales como las zonas de reservas campesinas.
Autor: Andrea Díaz.