Robo de energía, un delito latente en el Atlántico
En la última semana se han reportado varios episodios de este tipo al sur del departamento y en establecimientos comerciales en Barranquilla.
El Upme adjudicó dos nuevas obras de refuerzo eléctrico para Cartagena. Foto: Colprensa(Thot)
A través de un operativo conjunto realizado en días recientes, la Policía del Atlántico dio a conocer 4 casos de fraude de energía al sur del departamento, en fincas ganaderas y agrícolas.
El delito, constituido como defraudación de fluidos, fue evidenciado en 4 predios con igual número de transformadores que contaban con redes eléctricas que no estaban autorizadas por la empresa de energía Air-e y que representaron pérdidas estimadas en 151.096 kilovatios/hora/mes correspondiente a 112 millones de pesos.
Según las autoridades, uno de los casos se registró en inmediaciones del corregimiento de Algodonal, en jurisdicción de Santa Lucía, mientras que 3 fueron reportados en el área rural del municipio de Suan.
De acuerdo con el informe de la empresa, la energía robada equivale al consumo correspondiente de 500 familias en un mes.
Así mismo, confirmaron que en la Fiscalía cursan al menos 250 procesos penales por este delito.
“El robo de energía no solo afecta a la empresa sino al bolsillo de todos los pobladores de la costa. También la manipulación de la infraestructura pone en riesgo la vida de las personas”, afirmó Ramiro Castilla Andrade, Gerente de Air-e en el Atlántico.
Por otro lado, en las últimas horas se conoció el hallazgo de conexiones ilegales en locales comerciales de Barranquilla.
Una de estas en un establecimiento, en cercanías a la calle 33 con carrera 45, dentro de un centro comercial de la ciudad, donde se alteraron las líneas de energía para evitar el pago del consumo real, situación que se repitió en otro almacén, en la calle 37 con carrera 43.
Además de referirse a los esfuerzos para combatir el delito, la organización aseveró la pena de hasta 72 meses que tendría cometer este tipo de flagelos.
“El robo de energía afecta a toda la costa. También la manipulación de la infraestructura pone en riesgo la vida de las personas”, aseguró Air-e.
