Víctimas recusan a magistrado del Tribunal de Bogotá que tiene el caso Uribe

Una nueva complicación surgió en las últimas horas en el caso contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, imputado por los delitos de soborno de testigos y fraude procesal.

Los abogados representantes de víctimas recusaron al magistrado Carlos Andrés Guzmán Díaz, miembro del Tribunal Superior de Bogotá, a quien le correspondió resolver la apelación que interpuso la Fiscalía contra la decisión de la juez Laura Barrera, quien negó por segunda vez la preclusión a favor del expresidente.

El exfiscal Eduardo Montealegre, el abogado Reynaldo Villalba en representación del senador Iván Cépeda y el abogado Miguel Ángel del Río, apoderado de la médica Deyanira Gómez; presentaron recusación contra el magistrado por dos razones:

1. El magistrado Carlos Andrés Guzmán está casado con una asesora de la vicefiscal general de la Nación, Martha Mancera.

2. El mismo magistrado resolvió una tutela a favor de la Fiscalía y del expresidente Álvaro Uribe; y en contra de las víctimas.

Vamos por partes. El magistrado de la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá, Carlos Andrés Guzmán, está casado con la doctora Katerine López, quien es miembro de la Fiscalía General de la Nación, entidad que tiene interés en este proceso.

La esposa del magistrado no es un funcionaria más de la Fiscalía sino que es asesora de la vicefiscal general Marta Mancera, quien frecuentemente ha sido fiscal general por designación del titular Francisco Barbosa.

La Fiscalía ha hecho causa común con la defensa del expresidente Álvaro Uribe y los dos fiscales que, por delegación de Francisco Barbosa, han actuado en el caso han hecho mucho para desestimar las pruebas de la Corte Suprema y las víctimas contra el exmandatario y muy poco o nada para investigar al imputado.

Los recusantes aseguran que al estar casado el magistrado con un miembro de la Fiscalía debe apartarse del caso porque esa institución ha hecho pública su intención de no permitir que el proceso contra el expresidente avance, en contra del criterio de dos juezas de la República y de la Corte Suprema de Justicia.

La segunda razón de la recusación tiene que ver con la actuación del magistrado Carlos Andrés Guzmán, quien fue juez constitucional en una acción de tutela interpuesta el año pasado contra la Fiscalía dentro del mismo caso del expresidente Álvaro Uribe.

El doctor Guzmán actuó como magistrado ponente en una decisión del Tribunal que le dio la razón a la Fiscalía para que prosiguiera con la segunda preclusión a favor del expresidente Uribe.

Según las víctimas esto le impide al magistrado proceder con independencia y objetividad porque en la tutela ya conoció y decidió sobre aspectos de fondo del proceso y lo hizo a favor de la Fiscalía y del imputado exmandatario.

Dicen también los recusantes que si el magistrado resuelve como hasta ahora se le abriría el paso a una tercera solicitud de preclusión con lo cual se garantiza la impunidad porque la Fiscalía puede seguir probando hasta cuando encuentre un juez que le dé la razón o hasta que prescriba la acción penal.

Lo cierto es que a este punto, la recusación al magistrado y su trámite también acercan al expresidente Uribe a la prescripción, un camino muy conveniente para él y para la Fiscalía que ha perdido la batalla ante dos jueces, pero puede terminar ganando la guerra gracias al infalible vencimiento de términos.