Combates entre estructuras ilegales dejan más de 150 desplazados en Silvia, Cauca
Las víctimas están siendo atendidas por la administración municipal en albergues.
Las víctimas ya recibieron las primeras ayudas humanitarias. Crédito: Bomberos de Silvia.
Combates entre las disidencias de las Farc y el ELN en la zona rural del municipio de Silvia, al nororiente del Cauca, han provocado el desplazamiento de más de 150 personas. En la localidad, se vive una crisis humanitaria.
Los hechos tuvieron lugar en el territorio indígena de Kisgó, entre las veredas Penebio y Valle Nuevo, donde las fuertes confrontaciones obligaron a más de 40 familias indígenas y campesinas a abandonar sus hogares.
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El Consejo Regional Indígena del Cauca aseguró que “en los hechos quedan en medio del fuego cruzado familias del territorio también de la zona campesina. Entre las familias se encuentran niños, mujeres y adultos mayores que se han visto afectados gravemente”.
La alcaldía ha dispuesto de albergues para la atención de los desplazados, a quienes ya se les han entregado las primeras ayudas humanitarias.
El mandatario local, Juan Carlos López, manifestó que “62 personas pertenecientes al resguardo de Kisgó son atendidas en una institución educativa, y más de 100 del territorio campesino de Valle Nuevo se encuentran en el salón comunal”.
En medio de la emergencia, la guardia indígena logró la recuperación de tres comuneros que habían sido secuestrados por uno de los grupos armados.
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“Un integrante de la guardia indígena, el comunero José Adelmo Chocué Tombé, fue llevado a la fuerza por el grupo armado Dagoberto Ramos. Ante esta situación, la guardia indígena, comunidad y autoridad de Pueblo Nuevo se movilizaron hacia el lugar de los hechos, momento en el cual es retenido por el mismo grupo el comunero Robinson Chocué Tombé, junto a un menor de edad que lo guiaba hacia el sitio de retención”, comunicó la Asociación de Cabildos del Pueblo Nasa.
Al respecto, el consejero mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca – CRIC, Yesid Conda, explicó que “se está complicando la situación porque ya hay afectaciones directas contra la población civil (...) Nos preocupa que desde el Gobierno no haya pronunciamientos contundentes”.
Frente a la delicada situación, la ONU resaltó que le hace un seguimiento a la emergencia humanitaria en esa región del departamento y les pidió a los grupos armados que se respete la vida e integridad física y la autonomía de las comunidades.
“Exigimos el respeto a los territorios indígenas que no hacen parte de los grupos armados. También el respeto por la vida de los comuneros que no tienen nada que ver con el conflicto armado”, puntualizó el consejero Yesid Conda.
