Concesionaria en Bogotá contrata firma para obtener licencias ambientales de ampliación
Según revelaron fuentes cercanas al proceso, la concesionaria contrató a una firma internacional experta para adelantar nuevos estudios de impacto ambiental que permitan obtener los permisos necesarios.
Plan retorno a Bogotá. Foto: Guillermo Legaria/Getty Images. / Guillermo Legaria
La Concesionaria Ruta Bogotá Norte, encargada del millonario proyecto de ampliación de la Autopista Norte en Bogotá, se alista para enfrentar las consecuencias de la decisión de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) de archivar la licencia ambiental requerida para esta polémica obra.
Pese al duro golpe que representa esta negativa para avanzar a la fase de construcción, la compañía asegura que ya venía preparándose para este escenario.
Según revelaron fuentes cercanas al proceso, la concesionaria contrató a una firma internacional experta para adelantar nuevos estudios de impacto ambiental que permitan obtener los permisos necesarios.
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“No es un paso atrás, sino una oportunidad para demostrar nuestro compromiso real con el medio ambiente”, señaló un vocero de la concesionaria, quien pidió mantener su nombre en reserva. “Este proyecto no contempla intervenir humedales ni afectar el entorno natural, al contrario, busca restaurar ecosistemas y proteger la flora y fauna existente”.
La ampliación de la Autopista Norte, que beneficiaría a millones de habitantes de Bogotá y municipios aledaños, se ha visto envuelta en una creciente polémica debido a las preocupaciones ambientales. Organizaciones y comunidades temen por el impacto en los humedales de Torca y Guaymaral, áreas de gran importancia ecológica.
Sin embargo, la concesionaria insiste en que las obras mejorarían la conectividad hidráulica y restaurarían estos ecosistemas. “Hemos trabajado de la mano con las autoridades distritales y nacionales para resolver las inquietudes y demostrar que este es un proyecto responsable”, agregó el vocero.
Mientras tanto, la empresa continúa con sus labores de mantenimiento vial, construcción de ciclorrutas temporales y campañas de seguridad en el corredor de la Autopista Norte, a la espera de que se desbloquee la polémica situación ambiental que mantiene frenada la multimillonaria ampliación.
Ambientalistas y residentes de las zonas aledañas han anunciado que mantendrán la presión para evitar que el proyecto avance, convencidos de que representa una grave amenaza para los humedales capitalinos.
