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Policía Antinarcóticos desmanteló la “cocina de Guacho”

Se trata de un gigantesco complejo donde se producía alcaloide. En el lugar había 1.200 kilos de cocaína en proceso.

Dentro de unas canecas plásticas, se encontraron 1.200 kilos de clorhidrato de cocaína en solución. El proceso de decantación y secado para extraer los químicos estaba casi listo. Foto: Policía Antinarcóticos

La Policía de Antinarcóticos ubicó y destruyó un laboratorio de clorhidrato de cocaína, ubicado en la vereda El Pinde, en el municipio de Tumaco en Nariño.

El lugar era conocido como la “cocina de Guacho”, donde Walter Patricio Artízala Vernaza, alias Guacho y quien lidera una de las más peligrosas disidencias de las Farc, producía cocaína que servía para el sustento de su negocio criminal.

La Fuerza Pública viene adelantando intensas operaciones contra las disidencias de las Farc conocidas como Oliver Sinisterra en Tumaco. Así, información entregada a la Línea 167 permitió ubicar las coordenadas en donde estaba el complejo de producción de alcaloides.

La estructura escondida en la selva, rodeada de una espesa vegetación, por momentos impedía el desembarco de los comandos Jungla desde las aeronaves de la Policía Nacional.

Alrededor de 60 uniformados, a bordo de cuatro helicópteros UH-60 Black Hawk, llegaron hasta la vereda El Pinde en Tumaco y rápidamente coparon el lugar compuesto por ocho estructuras. Allí, se encontró un alojamiento para albergar más de 20 personas, pues había hamacas, toldillos, ropa, víveres y medicamentos.

En otro complejo, dentro de unas canecas plásticas, se encontraron 1.200 kilos de clorhidrato de cocaína en solución. El proceso de decantación y secado para extraer los químicos en la última etapa de oxidación estaba casi listo.

Cuando los uniformados registraban el laboratorio para su judicialización, encontraron una caleta subterránea adecuada con gruesos troncos de madera y tablas. Allí, se ocultaba una planta eléctrica industrial con capacidad para producir energía a una población pequeña. Esta era utilizada para generar la energía que consumen los hornos y las motobombas que recirculan las sustancias químicas durante el proceso.

El propio subdirector de la Policía Antinarcóticos, el coronel Tito Yesid Castellanos Tuay, aseguró que este gigantesco complejo tenía la capacidad de producir dos toneladas de cocaína a la semana: “Armar esta infraestructura en la selva tiene un costo de 6.200 millones de pesos (…) la producción de alcaloides era enviada a través de lanchas rápidas hasta Centroamérica”.

En el lugar, se encontró lo siguiente:

  • 1.215 kilos clorhidrato de cocaína en solución
  • 825 kilos de soda cáustica
  • 310 galones de ACPM
  • Una planta eléctrica
  • Cuatro marcianos
  • Cuatro churrusco
  • Una mesa de trabajo
  • Diez hornos microondas