Economía

Ataque Cerebrovascular: qué es, cómo prevenirlo y entidades de salud en Colombia

Cuatro expertos sobre el tema hablaron del ACV, la importancia de las entidades de salud y médicos, y de la pedagogía para identificar esta enfermedad.

El ataque Cerebrovascular (ACV) es la segunda causa de muertes en el mundo, con un total de 17 millones de personas fallecidas por año y 80 millones de sobrevivientes; sin embargo, de estos 80, 50 quedan con discapacidades graves irreversibles. Es por esto que en el lll foro Actúa con velocidad: Código ACV, Código de vida, se habló del ACV y la prevención sobre esta enfermedad.

El bienestar físico y de alimentación es parte fundamental para prevenir un ACV. Primero, es importante entender que el ACV es “Es un conjunto de enfermedades, y es el resultado de una alteración circulatoria aguda, que es la oclusión de un vaso del cerebro y su ruptura. Hay uno isquémico que es la oclusión del vaso, mientras que el hemorrágico es la ruptura”, explicó Muñoz Mario Muñoz, jefe de neurología de la Clínica Marly en Bogotá y fundador de RecaVar.

Uno de los puntos principales es la prevención. Es cierto que es una enfermedad que se puede evadir con una buena condición física, así como de alimentación nutricional que ayude a mantener malos hábitos atrás: “Nos habla de lo que no hicimos bien porque no la prevenimos como la hipertensión, diabetes, sobrepeso y obesidad. Eso nos remite a cómo es nuestro estilo de vida y qué hacemos para fomentarlo o no”, afirmó Nubia Bautista, subdirectora de enfermedades no transmisibles del Ministerio de Salud.

Para entender los síntomas de un ACV, es importante y vital tener en cuenta que, al momento de detectarlo, tenemos cerca de 4 horas y media para acudir a los servicios de urgencias médicas, pues luego de este tiempo no puede ser tratado con efectividad. Los síntomas más principales son: flacidez o debilitamiento en la mitad de la cara, brazo o pierna; dificultad al hablar, problemas o pérdida de visión en uno o dos ojos, fuerte dolor de cabeza y problemas al caminar. Es vital acudir al centro de salud especializado más cercano y de inmediato al momento de detectar los síntomas.

Toda persona que tiene un ACV y no logra ser atendida a tiempo tiene dos opciones: o fallece o queda con discapacidad permanente incluso en edad productiva. Cuando una persona desarrolla un síntoma de un ACV, solo tiene 4 horas y media para tratarlo, si no, no hay nada que hacer. Realmente un ACV es un infarto al cerebro”, dice Claudio Jiménez, director del centro ACV del Hospital Simón Bolívar de Bogotá.

Parte fundamental de salvarle la vida a alguien con un ACV es entender los síntomas, las consecuencias y el tiempo que se tiene para llevar de urgencia al paciente a los servicios médicos. Ante esto, no solo los médicos deben estar preparados, sino la población en general, quienes pueden ayudar con información sobre riesgo, prevenciones y cómo actuar.

En Colombia, hay algunos sitios especializados de salud sobre ACV, así como el Hospital Simón Bolívar. Sin embargo, los expertos mencionaron que es fundamental que todos los sistemas de salud estén capacitados para atender esta emergencia, teniendo en cuenta el entrenamiento del personal de la salud.

El ACV debe ser atendido en cualquier entidad de salud capaz. Tenemos grandes dificultades en establecer cuáles son. Lo único que se requiere es personas interesadas por ello y un tomógrafo. Incluso en ciudades pequeñas es posible. A MinSalud le toca este tema.  Ahorita no toda la población puede acceder. Debemos entender que el proceso es simple, que un médico general puede entender un ACV, mediante telemedicina por ejemplo. El tratamiento es otra cosa, pero quien salva la entidad física es en las 4 horas y es el médico”, afirmó Muñoz.  

Ante esto, Elisa Torrenegra, directora ejecutiva de Gestar Salud, habló sobre la capacitación de los prestadores de salud ante el ACV, así como del tratamiento que se debe dar a las personas que sufren de esto, quienes en su mayoría quedan con discapacidades.

Debemos tener en cada municipio una institución prestadora de primer nivel. Debe haber como mínimo una entidad para responder. El problema es la capacidad resolutiva para identificar, por parte del talento de salud, para esto y cómo actuar con el ACV. Uno influye que todos están suficientemente capacitados. Hay una necesidad de certificación del personal médico. Cuando uno contrata a prestadores de primer nivel, para resolver problemas de salud primordial, es importante que como país tengamos la tranquilidad de que el talento humano esté certificado y entrenado. El Ministerio debe establecer esto”, explicó.

Finalmente, Jiménez habló de casos exitosos que se han logrado en el Hospital Simón Bolívar y cómo ha avanzado el tratamiento de estos con los años, pero también del aumento de los ACV.

Para final de 2019, habíamos tratado 100 casos de ACV y solo pudimos trombolizar o realizar la disolución de coágulos de 2 pacientes. A partir de esto, creció la ruta y capacitación del código ACV. En el 2020 tratamos 282 y logramos trombolizar 52. En lo que va de 2021 van 380 tratados y se han hecho 70 trombolizaciones, así como activado 18 códigos de trombectomía, que es la otra terapia alternativa”, finalizó.

3 puntos de vista diferentes al momento de tener un paciente con  ACV:

1. Atención prehospitalaria: Harvey Neuta, Atención Prehospitalaria del Hospital Simón Bolívar. Bogotá, DC

2. Código ACV: Jorge Otero Gutiérrez, Coordinador médico de Urgencias de la IPS Universitaria. Medellín, Antioquia

3. Después del ACV

(en orden de aparición)

1. Joaquin Ledesma, Jefe de Enfermería de DIME Clínica Neurocardiovascular.

2. Lilian Lozada, Auxiliar de Enfermería de DIME Clínica Neurocardiovascular.
3. Susana Hurtado, Psicóloga Clínica de DIME Clínica Neurocardiovascular.

Cali, Valle del Cauca.