La razón por la que los hombres son más propensos a dormir después del sexo

Durante el acto sexual intervienen diferentes factores a nivel cerebral y hormonal, que lo convierten en una actividad que trae numerosos beneficios para la salud física y mental: disminuye el estrés, mejora el estado de ánimo, fortalece el sistema inmune y cardiovascular y, particularmente, ayuda a conciliar el sueño.

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Sin embargo, es de común conocimiento que los hombres son más propensos que las mujeres a dormir después del acto. Según la psicóloga y sexóloga Monica Branni, siete de cada diez hombres duermen o tienen inclinación a hacerlo después de haber tenido relaciones sexuales.

¿Por qué sucede esto? La ciencia tiene la respuesta.

Después de alcanzar el clímax, la respuesta orgásmica provoca que el cerebro se active en zonas específicas como la amígdala, directamente vinculada a la percepción del placer y las emociones. Además, la corteza prefrontal, donde opera la atención y la cognición, reduce su nivel de actividad.

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Lo anterior quiere decir que después del acto sexual, el cerebro recibe la señal de entrar en estado de relajación y que, a su vez, aumenta la producción de tres importantes hormonas: la oxitocina, la vasopresina y la prolactina.

Es precisamente la oxitocina la que ayuda a los hombres contraer la próstata y vesículas seminales. Así, una vez han liberado el estrés, es la oxitocina la que finalmente ayuda a conciliar el sueño.

En declaraciones recogidas por el portal Cuídate+, Jesús Rodríguez, director del Instituto Sexológico Murciano, explica por qué este fenómeno es diferente en hombres y en mujeres:

“Se ha podido observar que los cambios hormonales tras el orgasmo afectan de forma diferente a nuestra conducta según nuestro sexo, especialmente la secreción en grandes cantidades de oxitocina. Esto parece no afectar por igual a hombres y mujeres, generando en las mujeres un mayor deseo de apego y vínculo emocional y en el caso de los hombres somnolencia”.