Finalizaron ejercicios aéreos entre Colombia, Perú y Brasil en la Amazonia
La idea es articular la capacidad de respuesta para impedir el uso de los corredores de movilidad por parte de organizaciones al servicio del narcotráfico.
Foto: Fuerza aeroespacial
Durante cinco días las Fuerzas Aéreas de Perú, Brasil y Colombia, simularon la interceptación y transferencia de un tráfico aéreo irregular, que pretendía hacer uso ilícito del cielo tripartita; las aeronaves, en medio del ‘Ejercicio Combinado de Interdicción Aérea Amazonas II’, eran detectadas, transferidas y forzadas a aterrizar, en los aeródromos más cercanos.
“Durante los ejercicios militares se emplearon, entre otras, aeronaves E-99, C-26B, Citation SR-560, C-98, DHC-6-400, C-208, aviones Embraer Súper Tucano de Brasil y Colombia, así como el KAI KT-1P de Perú; tripulantes de las tres naciones, bajo estándares OTAN, realizaron la identificación y entrega del objetivo entre las Fuerzas. También hicieron parte fundamental del ejercicio, para brindar seguridad a los participantes de Amazonas II, los helicópteros Huey II de la Fuerza Aeroespacial Colombiana y el H-60 de la Fuerza Aérea Brasileña, con la capacidad para realizar misiones de búsqueda y rescate”, señaló la Fuerza Aeroespacial.
La idea, es articular la capacidad de respuesta para impedir el uso de los corredores de movilidad por parte de organizaciones al servicio del narcotráfico, además se busca ejercer soberanía y control sobre reservas naturales, así como supervisar los aeródromos de la región Amazónica.
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“Vale la pena resaltar que la FAC pasó de entrenar, a liderar operaciones contra el narcotráfico; a través de la Estrategia Zeus se busca combatir las aeronaves ilícitas fuera de la frontera, para lograr este objetivo en todo el territorio nacional, Zeus aplica tres códigos, Azul para la región Caribe, Rojo para el Pacífico y Verde para la Amazonía”.
“Las experiencias y conclusiones fueron compartidas en el cierre del ejercicio, destacando el aumento de las capacidades operacionales y el máximo aprovechamiento de los medios aéreos para generar afectaciones a economías ilícitas, gracias a las coordinaciones establecidas entre los Centros de Comando y Control de Perú, Brasil y Colombia, en beneficio de la Defensa Aérea de la región, la seguridad, el orden constitucional y la protección del medio ambiente”.
