
Desde su inicio, la fundación ha llegado a 260 municipios en el país. | Foto: Pedro Camelo - W Radio
Por casi 50 años, esta fundación se ha dedicado a crear oportunidades para personas con discapacidad
Desde brigadas en zonas apartadas de Colombia hasta innovación con alta tecnología en rehabilitación física, la Fundación CIREC impulsa procesos integrales de atención a personas con discapacidad y víctimas del conflicto armado, sin importar su condición socioeconómica.
Por: Pedro Camelo Castro
“Si tú llegas acá y no tienes una ruta de salud, no importa, nosotros miramos por dónde te enrutamos o pagamos tu tratamiento”. Así define Ofelminda Pachón Urrego, gerente de Sostenibilidad organizacional e Impacto social de la Fundación Cirec, la labor de esta organización que se dedica a la atención de personas con discapacidad.
Según la funcionaria, desde 1976, atiende anualmente un promedio de 20.000 usuarios de distintas regiones del país con diferentes servicios como atención médica, inclusión social y formación laboral a personas con discapacidad, y aunque el centro de atención ubicado en Bogotá funciona principalmente como una IPS, no dejan atrás su labor social.
Sus instalaciones en la capital cuentan con entornos adaptados para pacientes de todas las edades: piscinas para hidroterapia con diferentes profundidades, tinas individuales para vértigo y rehabilitación de miembros específicos, un gimnasio neurológico que dispone de equipos robóticos, simuladores de marcha y tecnología especializada para el manejo del dolor y edema, además de una moderna planta de producción que elabora prótesis a partir de moldes de yeso, termoplásticos y pruebas dinámicas.
Uno de los pilares de su trabajo social son las brigadas interdisciplinarias en territorio —que solo en 2025 han beneficiado a 130 personas en municipios como Istmina y Litoral del San Juan, Chocó—, financiadas a través de una triada compuesta por recursos propios, aportes de gobierno y en ocasiones con cooperación internacional.
Estas misiones en la última década han llegado a 260 municipios en Colombia, según afirma Jennifer Valderrama, quien hace parte del área de impacto social de la fundación. En cada una se desplaza un equipo completo —fisiatra, ortopedista, fisioterapeuta, terapeuta ocupacional, psicóloga, trabajadora social y personal de terapia física— para llevar atención especializada a comunidades históricamente excluidas.

La Fundación Cirec ha rehabilitado a 800.000 personas desde su inicio. | Foto: Pedro Camelo - W Radio
Valderrama explica que el proceso inicia con la caracterización de la población a través de aliados locales, la verificación de necesidades y condiciones, para posteriormente hacer el traslado del equipo de profesionales al territorio, donde se realizan valoraciones, se formulan ayudas técnicas (como prótesis o sillas de ruedas) y se inicia un proceso de adaptación funcional con cada persona: desde entrenamientos protésicos hasta enseñanza de habilidades básicas para la vida diaria. Luego, en Bogotá, se fabrican las ayudas y se programan nuevas visitas para su entrega y seguimiento.
Para Valderrama, la importancia de llegar a estas comunidades es de suma trascendencia, pues reconoce que en municipios alejados es muy poca la atención que reciben personas con discapacidad. “La comunidad suele recibirnos con calidez, aunque en algunos casos hay una prevención inicial marcada por factores sociales”, explica.

A la fecha, 1.632 personas han participado en programas de inclusión laboral y educativa liderados por Cirec. | Foto: Pedro Camelo - W Radio
La fundación también apuesta por la formación y la inserción laboral, beneficiando a mas de 1.600 usuarios a la fecha. Para quienes están en edad productiva, ofrece rutas de formación técnica, profesional o tecnológica, talleres para preparar hojas de vida y entrevistas, así como alianzas con empresas, el servicio público de empleo y cajas de compensación.
Además, bajo la Ley 2466, promueve culturas empresariales incluyentes, capacitando a la alta dirección y apoyándose en “entrenadores de vida”. Es decir, personas con discapacidad que lideran procesos de sensibilización.
De esta forma, Cirec ha llegado a más de 800.000 personas, entre las que se encuentran víctimas del conflicto y ciudadanos de todas las latitudes del país; su trabajo se ve reflejado en alrededor de 33.000 prótesis productivas y cerca de 29.000 dispositivos de movilidad entregados.
En un país donde más de 3 millones de personas tienen alguna discapacidad y solo el 1,9 % de ellas hace parte de la fuerza laboral, ese trabajo representa una apuesta concreta por reducir brechas de acceso, acompañar procesos de autonomía y generar oportunidades reales para todos y todas.
“Tal como afirma nuestra fundadora Jeannette Perry de Saravia, ‘Hay que vincular a las personas a la inclusión social’, por eso, nuestro modelo de sanación es físico, espiritual, emocional y social”, concluye Pachón.



