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Santos sostuvo que buscó detener los falsos positivos y pidió perdón

De acuerdo con su relato cuando estalló el escándalo tomó acciones con el respaldo de Álvaro Uribe, con el fin de erradicar ese fenómeno criminal.

Expresidente Juan Manuel Santos compadeció ante la Comisión de la Verdad por falsos positivos. Foto: Cortesía: Comisión de la Verdad

En una contribución a la Comisión de la Verdad, el expresidente de la República Juan Manuel Santos entregó su relato sobre el fenómeno criminal conocido como los "falsos positivos". Su participación se dio en el contexto de su cargo como ministro de Defensa (2006-2009) del gobierno Uribe.

De acuerdo con el exmandatario nacional, cuando llegó a esa cartera enfiló todos sus esfuerzos en fortalecer la política de derechos humanos en el interior de la institución castrense y aunque había ciertos rumores sobre las ejecuciones extrajudiciales, en un primer momento no las creyó.

"Confieso que en mis primeros meses en el ministerio escuché los rumores sobre la posible existencia de los falsos positivos, pero como entonces no pasaban de ser rumores sin evidencia que los sustentara, no les di credibilidad. No me cabía en la cabeza que algo así pudiera estar ocurriendo", dijo ante la Comisión de la Verdad.

El expresidente dijo que luego de empezar a recibir más información sobre esas denuncias adelantó sendas investigaciones administrativas junto con su viceministro Sergio Jaramillo, el general Fredy Padilla de León y otros funcionarios, quienes crearon una Comisión encabezada por el general (r) Carlos Arturo Suárez (para ese momento Jefe de Operaciones Especiales Conjuntas) que logró corroborar las irregularidades plasmadas en informes de inteligencia y otras justificaciones, con las que se encubrían los asesinatos.

"Al terminar de escuchar el informe quedé estupefacto. Tal vez nunca había sentido con tanta fuerza una combinación de ira e intenso dolor con tan profunda tristeza. Ya no podíamos seguir investigando. Era imperativo tomar decisiones", narró Santos.

En su relato el exmandatario señaló que se reunió inmediatamente con Álvaro Uribe (presidente para la época) en donde le expuso las denuncias del informe y le señaló que era imperioso retirar oficiales por cadena de mando y adoptar otras acciones, asimismo se gestó un cambio de doctrina (en lo referido a la presión por obtener bajas). Todo lo anterior fue aceptado por el expresidente a su ministro Santos.

"En honor a la verdad, tengo que decir que el presidente Uribe no se opuso al cambio de esa nefasta doctrina, que él mismo había estimulado. Nunca recibí una contraorden, ni fui desautorizado", sentenció.

De acuerdo con el expresidente de la República, para él derrotar a las Farc era un "imposible categórico, militar y moral" y su enfoque se centró en debilitar a la guerrilla y llevarla a una mesa de negociación. Ello marcó su principal distancia con el expresidente Uribe, quien ni siquiera reconocía la existencia de un conflicto armado.